miércoles, 10 de marzo de 2010

CLAVES DE UNA POESÍA FRESCA ABRIGADA CON LOS RAYOS DEL SOL



La poesía sintetiza la cotidianidad del tejedor de ilusiones, de la vendedora de rosas en el infortunio de la calle, de las guerras que confirman la estupidez humana, de la humedad que brota de la piel de los amantes, de los juegos infantiles divirtiendo a la vecindad del barrio populoso, de la psicosis del hombre, de la sensualidad de la mujer…, para lo cual el creador usa y abusa imágenes atrayentes que se funden en el papel en blanco. La poesía es vida y tormento. Placer y tortura. Ternura y dolor. La poesía refleja la capacidad intelectiva del ser humano, a partir de la búsqueda incesante de la estética en la palabra escrita. La poesía es artilugio de la prostituta madrugada y estratagema en la batalla inútil del amor.

Gabriela Ponce es una joven poeta que se regocija con el verbo, y se aprisiona con el verso. Oriunda de Otavalo -ciudad en donde se “teje quimeras/ …de trueque/ de quebradas minerales y cascadas”-, Gabriela es una persona obsesionada por la descripción de las horas perdidas entre miradas furtivas y cigarrillos encendidos. Gabriela es dueña de un discurso poético que le acerca a la preocupación social y al grito rebelde en contra del oprobio y la expoliación. “A quién le debo/ la segregación de mi hermano/ la xenofobia de mi raza/ la piel canela que me abraza/ quien me heredó tanta burocracia/ A quién debo/ si lo he pagado todo/ A quién presto/ si nací endeudada”. Su estilo irónico, a ratos se contagia con la denuncia, frente al monopolio económico, político, comercial, mediático… “La sangre vende/ al igual que los buenos culos/ si no provocan llanto/ por lo menos lograrán/ el eureka de más de un impotente/… Plebiscito mundial,/ afuera Bush maniático mental,/ una patada en el culo a la Política Internacional”.

Poesía fresca cuyo componente fuerte se advierte en el abrazo de los cuerpos sedientos de vino y nocturnidad. Por ello, la entrepierna se confunde con las sábanas y el calor de la pareja que se separa con la fugacidad del tiempo, tras el silbido de los pájaros, luego del invierno. “Dos cuerpos se juntan/ en ceremonia nocturna/ El sudor baña las sombras/ entre cánticos profanos/ La cópula es santificada/ con bendición de dioses y demonios”. El recuerdo se interpone como una melancólica sinfonía de anécdotas y vivencias, en medio del llanto y el insomnio, de la crueldad y la imparable lluvia. Gabriela emana el karma de la luna dibujada con resplandor en el cielo, de los abuelos que nos legaron sabios consejos, del pueblo sarance aferrado a los colores múltiples, las alpargatas y los ponchos, del barrio caliente y tradicional, de los amigos de siempre, de las mariposas y las montañas que nos rodean como dioses custodiando la nada.

“Clave de Sol” (UTN, 2007) titula la nueva obra de Gabriela. Varios poemas recoge este sencillo texto, el mismo que delata la pasión de la autora por el hecho literario. “El poema me agarra, me escapo,/ el poema me persigue, me mutila,/ a pesar de todo sigo viva”.

“Clave de Sol”; ritual de las ideas íntimas, morada de la compasión, cueva en donde reposan los demiurgos eternos, invocación etérea del adiós, extravío de los pensamientos, descripción de la manzana mordida al inicio del acto sexual, figura musical de fortaleza auditiva, sombra de una época de paradojas y ríos nauseabundos, bosquejo poético que se cobija con lo profano y el pacer, pacto con Ícaro sin alas…

Gabriela Ponce, poetisa de rumores y sacrilegios, de lágrimas y pinceladas, de viajes y amaneceres… “Ella danza al final de la palabra/ ella danza en el último filo del mundo/ ella llora en la última roca de un volcán/ ella coge el filo de la luna y canta”.

Otavalo, marzo 21 del 2007

2 comentarios:

  1. cordial saludo, estamos interesados en contactar a gabriela, es posible un correo o celular, soy de San Juan de PASTO Y NOS INTERESA PARA UN RECITAL. yrosero44@yahoo.com

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    1. Hola! puedes escribir al gaby21ponce@gmail.com ... Saludos

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