De una manera persistente, metódica y hasta obsesiva, Xavier Oquendo
Troncoso, poeta y gestor cultural, ha logrado que el Encuentro
Internacional de Poesía en Paralelo Cero en nuestro país atraviese los 6
años de existencia, a pesar de cierta desidia estatal y del nulo
auspicio privado derivado en este 2014.
Precisamente, a inicios de este mes, Paralelo Cero fue el epicentro
lírico en varias ciudades: Quito, Guayaquil, Riobamba, Cuenca, Otavalo,
Esmeraldas y Atacames. Evento en donde se rindieron sendos homenajes a:
Pedro Jorge Vera, Manuel Zabala Ruiz, Jacinto Cordero Espinosa y Antonio
Preciado Bedoya. También en donde se dieron a conocer 12 títulos de
recientes obras bajo el sello de El Ángel Editor y se expuso un par de
conferencias.
Cerca de 40 poetas nacionales y de otras latitudes: Chile, Argentina,
Colombia, España, Perú y Cuba (reunidos además en el libro antológico
respectivo), compartieron a través de lecturas de textos, su producción
poética, desde sus individualidades, que marcan el insondable ritmo del
autor(a). Sin embargo de las dificultades presupuestarias, Paralelo
Cero, en este año, salió ileso de escollos y lastimaduras, en espera de
que a futuro haya las condiciones propicias de estamentos encargados
directamente de apoyar actividades de enorme trascendencia en el campo
de las letras. Que la tenacidad e interés de Oquendo Troncoso sirvan de
ejemplo a quienes, por obligación, deberían impulsar proyectos de
envergadura en el ámbito de la cultura antes de regodearse en cargos
públicos al peor estilo de la burocracia dorada.
Enhorabuena que Paralelo Cero no se vio afectado en su realización,
ya que las puertas se abrieron en alcaldías, embajadas, centros
académicos, galerías, universidades y la Casa de la Cultura Ecuatoriana
Benjamín Carrión. Encuentro de decires y gestos que convocan a la
solidaridad humana, de soledades regocijadas con el vuelo del tierno
colibrí y apesadumbrados con la caída de la tarde. Encuentro de caricias
y saudades a través del verso eterno.
Las voces ecuatorianas de Cristian López, Gabriela Ponce, Nelson
Villacís, Sophía Yánez, Luis Enrique Yaulema y Marcos Rivadeneira Silva
denotan la vocación inclusiva de los recitales programados y la ruptura
de posibles cenáculos literarios. Y, a su vez, las expresiones
provenientes del extranjero le nutren de un inconfundible hálito
poético, a través de: Jorge Ariel Madrazo, Eduardo Chirinos, Juan Carlos
Mestre, Víctor Rodríguez Núñez, Alberto Szpunberg, Hellman Pardo.
Quedan otros nombres al margen de este texto; de los nuestros y de otros
lares foráneos. A todos ellos y ellas, vaya el reconocimiento por su
incansable búsqueda del barro y la hogaza de cada día.
Mientras nuestros cuerpos descansan, Víctor Rodríguez Núñez se
confiesa: “No sé por qué camino/ pero he llegado aquí/ Hasta este raro
sitio/ sin casas ni paisaje/ Este lugar desnudo/ de las piedras al alma/
donde el mundo germina/ Quizás también tú llegas/ siguiendo ese camino/
En esta vida harta/ de aciertos y certezas/ solo el error nos une/ La
poesía es el reino/ de los equivocados”.
Diario El Telégrafo / 24 Jun 2014
http://www.telegrafo.com.ec/opinion/columnistas/item/paralelo-cero-poesia-y-pan-para-el-hombre.html