En San Antonio de Ibarra, parroquia laboriosa y pujante de Imbabura,
se expone desde el 30 de octubre el talento de 47 artistas en el marco
de la IV Bienal Nacional de Escultura 2012, la misma que concluirá el
próximo 27 de noviembre.
En las salas del Centro Cultural Daniel Reyes y de la Asociación de Artesanos -en donde se ha planificado visitas guiadas- se puede apreciar, tras un adecuado montaje museográfico asesorado por técnicos cuencanos, la subjetividad plasmada en obras escultóricas elaboradas con diferentes materiales, que van desde la madera, arcilla, barro, resina, yeso, piedra, aluminio, cartón hasta el bronce, cobre, metal y otros objetos reciclados. Los participantes provienen de diversos rincones del Ecuador. Las instalaciones también se suman a esta iniciativa que cuenta con el apoyo de instancias gubernamentales, en el afán de reivindicar la memoria colectiva y el patrimonio cultural e incentivar a la difusión de las manifestaciones artísticas.
Cabe resaltar a los ganadores de los tres primeros premios, en su orden: Mario Plasensia Recalde (Savia de vida), Edwin Limaico Brusil (Levitación implacable) y Carolina Bone Lemos (Autorretrato). A más de lo anotado, también existen cinco menciones de honor. Todos ellos reciben estímulos de carácter económico.
Al final, también habrá un reconocimiento adicional al trabajo que haya obtenido el mayor respaldo ciudadano a través de la votación individualizada.
En las bases instituidas para el concurso se establece la posibilidad de que la temática sea libre. En ese sentido, en el presente año el Comité Ejecutivo Organizador ha puesto empeño en mejorar el nivel de participación a través de un reglamento. Hay una percepción general de estética y sensibilidad humana al visualizar las obras que han sido moldeadas por manos pacientes y ciertamente creativas. La conflictiva relación hombre-naturaleza, problemática ambiental, desigualdad social, discriminación étnica, inconsciencia vial, cuestionamiento a la labor mediática, experimentación vivencial, reflejo del yo interno, alusión al cosmos, entre otros aspectos, nutren a esta bienal, en donde las esculturas guardan equilibrio y volumen, además de apropiarse de los espacios con autonomía propia, diversos influjos y corrientes clásicas y contemporáneas.
Encomiable es el empeño dispuesto por el equipo planificador del certamen, a la cabeza Edmundo Fierro, coordinador, y Luis Alberto Vinueza, curador. Precisamente, Vinueza considera vital que se efectúe esta actividad en San Antonio, ya que “la creatividad y fantasía de cada artista libremente se plasman en la madera, la piedra, el metal y el lienzo. Estos trabajos enlazan el pasado y el presente, con el talento y el respeto que merece la tradición local, que cuida celosamente su acreditada trayectoria”.
Estimado/a lector/a, con lo expresado, ya cuenta, entonces, con un valioso pretexto cobijado de arte, para visitar y apropiarse del encanto de la provincia azul de los lagos.
Diario El Telégrafo / 21 Nov 2012
En las salas del Centro Cultural Daniel Reyes y de la Asociación de Artesanos -en donde se ha planificado visitas guiadas- se puede apreciar, tras un adecuado montaje museográfico asesorado por técnicos cuencanos, la subjetividad plasmada en obras escultóricas elaboradas con diferentes materiales, que van desde la madera, arcilla, barro, resina, yeso, piedra, aluminio, cartón hasta el bronce, cobre, metal y otros objetos reciclados. Los participantes provienen de diversos rincones del Ecuador. Las instalaciones también se suman a esta iniciativa que cuenta con el apoyo de instancias gubernamentales, en el afán de reivindicar la memoria colectiva y el patrimonio cultural e incentivar a la difusión de las manifestaciones artísticas.
Cabe resaltar a los ganadores de los tres primeros premios, en su orden: Mario Plasensia Recalde (Savia de vida), Edwin Limaico Brusil (Levitación implacable) y Carolina Bone Lemos (Autorretrato). A más de lo anotado, también existen cinco menciones de honor. Todos ellos reciben estímulos de carácter económico.
Al final, también habrá un reconocimiento adicional al trabajo que haya obtenido el mayor respaldo ciudadano a través de la votación individualizada.
En las bases instituidas para el concurso se establece la posibilidad de que la temática sea libre. En ese sentido, en el presente año el Comité Ejecutivo Organizador ha puesto empeño en mejorar el nivel de participación a través de un reglamento. Hay una percepción general de estética y sensibilidad humana al visualizar las obras que han sido moldeadas por manos pacientes y ciertamente creativas. La conflictiva relación hombre-naturaleza, problemática ambiental, desigualdad social, discriminación étnica, inconsciencia vial, cuestionamiento a la labor mediática, experimentación vivencial, reflejo del yo interno, alusión al cosmos, entre otros aspectos, nutren a esta bienal, en donde las esculturas guardan equilibrio y volumen, además de apropiarse de los espacios con autonomía propia, diversos influjos y corrientes clásicas y contemporáneas.
Encomiable es el empeño dispuesto por el equipo planificador del certamen, a la cabeza Edmundo Fierro, coordinador, y Luis Alberto Vinueza, curador. Precisamente, Vinueza considera vital que se efectúe esta actividad en San Antonio, ya que “la creatividad y fantasía de cada artista libremente se plasman en la madera, la piedra, el metal y el lienzo. Estos trabajos enlazan el pasado y el presente, con el talento y el respeto que merece la tradición local, que cuida celosamente su acreditada trayectoria”.
Estimado/a lector/a, con lo expresado, ya cuenta, entonces, con un valioso pretexto cobijado de arte, para visitar y apropiarse del encanto de la provincia azul de los lagos.
Diario El Telégrafo / 21 Nov 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario